jueves, 7 de marzo de 2013

La promesa nunca tarda.



   Cuando tu Dios esconde su rostro, no digas que te ha olvidado. El se tarda un poco, para hacerte que le ames mas, y cuando venga, entonces tendrás plenitud de gozo y entendimiento, y te regocijaras.

   El esperar ejercita nuestra gracia, el esperar prueba nuestra fe, por lo tanto espera con esperanza, porque la promesa nunca tarda,ni llega tarde. Isaias 30:18. "Por tanto Jehová espera para tener piedad de nosotros" .
JPI.